Cuidar el medioambiente no requiere grandes acciones, desde tu propia casa puedes contribuir a su protección. Lo más importante es sensibilizarnos y realizar pequeños cambios que contribuyan a cuidar el planeta en el que vivimos y sobre todo poder trasmitir estas acciones a nuestras familias.
Te dejamos algunos consejos muy sencillos:
- Usa productos que puedan reutilizarse. Hay muchos productos que se pueden usar varias veces para proteger la naturaleza. Por ejemplo, utiliza servilletas de tela en lugar de servilletas de papel.
- Apaga las luces. Parece obvio, pero no nos damos cuenta de la cantidad de veces que encendemos la luz de una habitación que no ocupamos. Acostumbra a tus hijos a apagar la luz y cuando te marches de casa comprueba que todo está apagado.
- Evita dejar los aparatos enchufados. Recuerda que los aparatos que están apagados pero siguen enchufados consumen energía, por lo que es importante desenchufarlos.
- Cierra los grifos correctamente. Cuando no utilices el agua, cierra el grifo y controla que no existan fugas.
- Lleva tus propias bolsas al supermercado. Cada vez son más los supermercados que venden las bolsas de plástico para evitar su uso y fomentar el reciclado. Llévate tus propias bolsas al supermercado y podrás utilizarlas varias veces.
- Aprovecha la luz natural. Para reducir el consumo de luz eléctrica, abre las ventanas para que entre la luz del sol en tu casa.
- Recicla todo lo que puedas. Antes de tirar ropa, libros o juguetes, piensa si puedes darles una segunda oportunidad para evitar gastar y comprar todo nuevo. Ahorrarás dinero y protegerás la naturaleza.
- Planta árboles. Los árboles producen oxígeno y son esenciales para la naturaleza, así que planta un árbol en tu casa o en la comunidad donde vives.
Como puedes leer, son acciones pequeñas que facilitan el ahorro de energía, el reciclaje y el cuidado de los recursos naturales.